Siguiendo con este fanatismo que tengo por las bandas de un solo disco; Megapuss llega a mis oídos un 24 de Febrero de 2009 en la Terminal 2 del Aeropuerto de la Ciudad de México. ¿Por qué recuerdo el momento? Estaban a punto de iniciar mis 3 días de inducción a un nuevo trabajo y me había ido una semana a ver a la familia. Megapuss tocaba ese mismo día por la noche en el Teatro de la Ciudad como parte de los eventos del FICCO. Mi consuelo por perderme el evento, se encontraba convirtiendo a formato MP3 para escucharlo durante el vuelo. Carajo.
Esta banda (catalogada como super group) contiene entre sus filas y como principal frontman nada más y nada menos que al mismo Devendra Banhart, quien junto a sus compañeros de aventura (Fabrizio Moretti de The Strokes, Greg Rogove de Priestbird y al mismo productor de cabecera de Banhart) decidieron vender un producto de un ‘chiste local’ a una compañía disquera. Megapuss surgió del entretenimiento detrás del escenario entre Noah y Devendra de lazar al aire un titulo ‘gracioso’ para una canción y tratar de componerla siguiendo el tema principal del título en tan solo 10 minutos. Absurdo, bastante desechable, pero funcionó.
A pesar de estar frente a un álbum en el cual abunda la estupidez en sus letras a lo largo del disco; estos talentosos músicos, logran entregar un álbum que si bien está muy inclinado hacia el estilo característico folk / pop de los 60s que Devendra Banhart domina, hace sentir como si fuera una banda que llevara muchísimo tiempo tocando juntos, que es fácil dejarte llevar por la seriedad y empeño en la ejecución y dejar atrás las palabras que acompañan cada tonada.
El album abre con la que es, a mi humilde opinión, la canción más solida en este compendio: Crop Circle Jerk ’94. Conscientes que todo esto es una broma, la banda suena en su más pura felicidad y ligereza en su conjunto; el cumplir su capricho de hacer 'un disco con tus mejores amigos músicos' estaba comenzando. To The Love Within, juega con nuestra mente al invitarnos tanto a al jogo de la capoeira como a una gran fogata en medio de la California y su ambiente hippie; a sabiendas de su repetitiva frase a lo largo de la canción que crece –asi como las voces involucradas- hasta convertirse en la perfecta pieza de sonido para una congregación. El primer y único sencillo de este álbum, Adam and Steve, podría ser la respuesta psicodélica al track inicial del álbum; en su burla, llega a jugar en la guitarra con el riff del sax de Careless Whisper, si, de Wham!
Follarse al presidente, a Enron, al mismo Devendra, diferentes tipos de Hummus, senos de pollo, gente vestida de pato, son varias de las temáticas que, a pesar de la diversa ‘seriedad’ de los títulos contenidos, funcionan muy bien! No existe alguna ambición a largo plazo de llevar a Megapuss a un siguiente álbum, esto quedará así: meramente un proyecto para la posteridad y servirá como el periodo que sus integrantes necesitaban para tomarse un respiro de sus principales ocupaciones. ¿Por qué? Porque pueden. Que lo disfruten.
Esta banda (catalogada como super group) contiene entre sus filas y como principal frontman nada más y nada menos que al mismo Devendra Banhart, quien junto a sus compañeros de aventura (Fabrizio Moretti de The Strokes, Greg Rogove de Priestbird y al mismo productor de cabecera de Banhart) decidieron vender un producto de un ‘chiste local’ a una compañía disquera. Megapuss surgió del entretenimiento detrás del escenario entre Noah y Devendra de lazar al aire un titulo ‘gracioso’ para una canción y tratar de componerla siguiendo el tema principal del título en tan solo 10 minutos. Absurdo, bastante desechable, pero funcionó.
A pesar de estar frente a un álbum en el cual abunda la estupidez en sus letras a lo largo del disco; estos talentosos músicos, logran entregar un álbum que si bien está muy inclinado hacia el estilo característico folk / pop de los 60s que Devendra Banhart domina, hace sentir como si fuera una banda que llevara muchísimo tiempo tocando juntos, que es fácil dejarte llevar por la seriedad y empeño en la ejecución y dejar atrás las palabras que acompañan cada tonada.
El album abre con la que es, a mi humilde opinión, la canción más solida en este compendio: Crop Circle Jerk ’94. Conscientes que todo esto es una broma, la banda suena en su más pura felicidad y ligereza en su conjunto; el cumplir su capricho de hacer 'un disco con tus mejores amigos músicos' estaba comenzando. To The Love Within, juega con nuestra mente al invitarnos tanto a al jogo de la capoeira como a una gran fogata en medio de la California y su ambiente hippie; a sabiendas de su repetitiva frase a lo largo de la canción que crece –asi como las voces involucradas- hasta convertirse en la perfecta pieza de sonido para una congregación. El primer y único sencillo de este álbum, Adam and Steve, podría ser la respuesta psicodélica al track inicial del álbum; en su burla, llega a jugar en la guitarra con el riff del sax de Careless Whisper, si, de Wham!
Follarse al presidente, a Enron, al mismo Devendra, diferentes tipos de Hummus, senos de pollo, gente vestida de pato, son varias de las temáticas que, a pesar de la diversa ‘seriedad’ de los títulos contenidos, funcionan muy bien! No existe alguna ambición a largo plazo de llevar a Megapuss a un siguiente álbum, esto quedará así: meramente un proyecto para la posteridad y servirá como el periodo que sus integrantes necesitaban para tomarse un respiro de sus principales ocupaciones. ¿Por qué? Porque pueden. Que lo disfruten.
Devendra... chiste local...folk de los 60´s... mmm ¡me llevo cinco!
ResponderEliminarChingón. Keep blogging!